CIRO CASTILLO
Al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, le preguntaron si viajaría a Chiapas para atender la situación de emergencia que se vive por las lluvias y respondió que por ahora no.
Queda claro que la presencia de un político en un lugar donde se padece una catástrofe no terminará con los daños y efectos que han dejado, en este caso el frente frío número once y la depresión tropical “Eta”.
A pesar de lo anterior, su presencia es sumamente importante para la toma de decisiones, pues no es lo mismo que te lleguen al escritorio los reportes a verlos en vivo y en directo.
AMLO conoce a la perfección gran parte del país y particularmente a Tabasco y Chiapas, pero, insistimos, su presencia, además de alentar a la población haría que los trabajos se apresuren.
Sobre todo ahora que el Fonden ha desaparecido formalmente, se requiere agilizar el envío de recursos a Tabasco, Chiapas y Veracruz, pero cuando todo depende de un funcionario en Hacienda, la decisión puede tardar días o semanas en tomarse y la gente afectada no está como para esperar.
Así que, no le negamos al Presidente que tenga el conocimiento de las zonas que ahora padecen una emergencia, pero su presencia serviría para dar un empujoncito…
CASI 200 MIL DAMNIFICADOS
Laura Velázquez Alzúa, titular de la Coordinación Nacional de Protección Civil (CNPC) presentó este lunes en la mañanera un primer balance de los daños que han dejado las lluvias en tres estados.
La cifra de damnificados, aunque el conteo aún no ha terminado, casi llega a los 200 mil, sin contar los daños carreteros, algunos puentes colapsados y sistemas de agua potable con afectaciones.
La pregunta es de dónde sacarán los recursos para atender esta emergencia, cuando apenas hace un par de semanas se concretó la desaparición de 109 fondos, entre los que estaba el de emergencias.
Se argumentó de parte del gobierno federal, que los dineros recabados serían utilizados para la otra emergencia: la sanitaria.
El problema es que no creyeron que tan rápido tendrían que atender una situación como la provocada por las lluvias que, solo en Chiapas han dejado daños en más de 50 municipios.
Cuando el titular de Hacienda, Arturo Herrera argumentó a favor de la desaparición de los fideicomisos, afirmó que muchos de ellos tenían bolsas que no se utilizaban.
Manifestó que los recursos no desaparecerían, sino que se enviarían de forma directa y sin intermediarios, para evitar la corrupción.
Ojalá entonces que los recursos no falten para los miles de damnificados, quienes ahora más que nunca necesitan un empujoncito…
CACHETADA
La naturaleza nos volvió a recordar lo abusivos que hemos sido con todo lo que nos brinda.
Que los ríos y arroyos se desborden no es el problema, pues esto ha ocurrido por miles de años.
El problema es que desde hace décadas las comunidades, los pueblos y las ciudades, comenzaron a construirse literalmente encima de los cauces de ríos y arroyos, quienes siempre buscan abrirse paso.
El otro gran asunto es la depredación de los árboles, los cuales son contenedores de las avenidas de agua.
Sin esos grandes árboles y sus raíces conteniendo el agua, ésta baja a “rajatabla” y no hay poder humano que la controle. Para que la naturaleza cause daños no se necesita mucho, solo un empujoncito…
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