Pisando “callos”: Ensalada de grillos

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CIRO CASTILLO

Ya no recuerdo exactamente cuando se comenzó a hablar de “huachicoleros”, de “huachicoleo”, de “ordeñadores de ductos” de Pemex y de “chupaductos”.

El problema de robo de combustibles, como muchos otros problemas que enfrenta nuestro país, es multifactorial.

No se entiende el fenómeno sin una serie de complicidades, sin la corrupción.

No es negocio de uno solo, sino de una serie de personas que encontraron en este ilícito su negocio y forma de vida.

Tampoco se niega que, en muchos temas de inseguridad y delincuencia, la extrema pobreza también es factor.

Participan, seguramente, personal de Pemex, policías de diferentes niveles que se hacen de la vista gorda, presidentes municipales, gobernadores y uno que otro funcionario federal.

Por eso ahora que el nuevo gobierno intenta contener este tremendo problema, los coletazos no pueden faltar.

No es uno, sino toda una cadena de personas las que están resultando afectadas. Están, como se dice coloquialmente, “pisando callos”…

POPULARIDAD DE AMLO A PRUEBA

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró en su conferencia mañanera de inicio de semana, que hay suficiente gasolina y reservas.

El problema es, dijo, que el cierre de ductos para impedir que siga el robo de combustibles, ocasionó una escasez.

El gobierno de la república y Pemex optaron por dar prioridad al uso de pipas en la distribución de combustibles, pero esto ha ocasionado tremendas colas en las gasolineras de nueve estados del Centro, el Bajío y el Norte del país.

Circularon imágenes y videos en redes sociales, donde se puede apreciar enormes filas de automovilistas tratando de abastecerse de combustible en estados como Guanajuato y Michoacán.

El mandatario mexicano pidió “paciencia” porque el atraso tiene que ver con esta guerra contra el robo de combustibles.

Aseguró que solo en los primeros días de la nueva estrategia, el “pico” de robo de combustibles bajó de mil a 100 pipas diarias.

La popularidad del Presidente de México se pone a prueba con esta estrategia, porque si bien es bienvenida, también ocasiona inconformidad y malestar.

QUIÉN DIJO QUE EL EJÉRCITO NO SIRVE

La estrategia de seguridad del nuevo gobierno, hasta ahora sigue basada en el uso del Ejército Mexicano y la Marina.

Aquella idea de sacar de inmediato a las fuerzas armadas de las calles, ya es historia.

Incluso, en los últimos días, el Ejército entró a vigilar y cuidar las instalaciones de Pemex en distintos estados como Sinaloa, Veracruz y Oaxaca.

Es tanta la corrupción que presuntamente había en Pemex, que ha sido necesario ponerles vigilancia a quienes trabajan, principalmente en la distribución. Unos 4 mil elementos vigilan las refinerías…

 

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