EDG INFO
La última vez que hablé con el Doctor Macías fue el 19 de enero de este año.
Eran casi las 11 de la noche y respondió la llamada telefónica, como siempre: amable, cordial y calmado. A él parecía que el tiempo no le apremiaba.
Le pedí ayuda porque un niño había sufrido un accidente de tránsito y requería ayuda para internarle en el Hospital Pediátrico.
Como médico y amigo, me regaló una opinión a la distancia y accedió a proporcionarme el número telefónico de la Directora del Pediátrico, aunque sabía cuál sería el resultado de mi gestión.
Aún bromeamos respecto del COVID19 y me dijo que teníamos que seguir cuidándonos porque las cosas estaban fuera de control. Aún le alcancé a preguntar de sus carros que tanto le gustaban.
Hoy me entero, igual que muchas personas que lo apreciábamos, que el prominente cirujano gastroenterólogo, quien también era Presidente de la Comisión Estatal de Arbitraje Médico, ha partido.
Le sorprendió, como a muchos, el maldito COVID19. No le permitió mucho tiempo para luchar.
Nos deja su amistad, su sonrisa franca, su paciencia como médico y como persona.
Nos deja una lección de humildad, pues él siempre fue un convencido de que el médico, por especialista que sea, tiene que tener los pies en la tierra y atender a cada paciente como si fuese su familiar.
Nos deja con un vacío, pero también la sensación de haber estrechado su mano en tantas ocasiones y de un abrazo franco.
Lo extrañarán sus compañeros, sus pacientes, sus amigos, su familia, lo extrañaremos todos.
Hasta siempre Doctor Macías…
