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San Cristóbal de Las Casas.- La mañana del pasado martes, dos mujeres indígenas tzotziles fueron detenidas y acusadas de realizar actos de brujería, porque, según, en la comunidad Cuchuluntik un hombre “perdió las ganas de vivir y se encuentra tirado en cama”.
Los vecinos del lugar enfatizaron que habían sido sorprendidas realizando entierros cerca de la casa de la víctima, y por eso fueron puestas en la cárcel de la localidad y castigadas de acuerdo a sus usos y costumbres.
Por ese delito comunal pagaron una multa de 100 mil pesos cada una y fueron puestas en libertad con la advertencia de abandonar la comunidad, ya que de lo contrario podrían sufrir violencia porque los pobladores “les guardarían rencor”.
De acuerdo a activistas sociales, “este acto se trata de discriminación; e San Juan Chamula las mujeres no tienen propiedades, no tienen voz en las asambleas, y siguen siendo violentados sus derechso: no pueden retenerlas, encarcelarlas o golpear a una mujer sin tener pruebas, no pueden los usos y costumbres violentar los derechos de la mujer, los derechos humanos”.
(Con información de Félix Camas)
