VÍCTOR GARCÍA
EDG INFO
Con el Mequé, que en zoque significa “fiesta”, tamboreros y piteros de Tuxtla Gutiérrez en la víspera de su festejo celebraron el sábado a la Virgen de Santa Cecilia con un paseo de su imagen y la entrega de diplomas de reconocimiento a personas que de una u otra manera han contribuido a la preservación de “el costumbre”.
Destacó el reconocimiento para el antropólogo Leopoldo Gallegos Vázquez (+) acaecido en este año dejando un importante legado que sigue vigente con estudios de la música, los bailes, la gastronomía e infinidad de conceptos entre los zoques.
Por cinco años consecutivos, los padrinos de la imagen de Santa Cecilia: Aurora Oliva y Fernando de Hijar, sumaron esfuerzos en esta ocasión con la maestra Carmen Palacios para hacer posible esta significativa fiesta (mequé) que inició en casa del maestro baile: Cecilio Hernández en su domicilio en la colonia las canoítas.
Con música del tambor y carrizo la imagen de Santa Cecilia fue trasladada de la casa del maestro Cecilio Hernández al domicilio de la familia Jiménez Palacios en el barrio de San Roque, en donde se llevó a cabo el “mequé”, sirviéndose una rica comida al estilo zoque, sin faltar el exquisito pozol de cacao.
Ya instalada la imagen de Santa Cecilia en el altar principal que estuvo adornada con frescas flores de la región y Joyonaques (flor costurada), sin faltar el agradable incienso, los tamboreros y piteros tocaron durante varias horas una serie de sones para animar la víspera de la celebración a la usanza zoque a la “patrona de los músicos” que la grey católica lo festeja este 22 de noviembre.
Además de la música del tambor y el carrizo como parte de este festejo, los padrinos de la imagen: Aurora Oliva y Fernando de Hijar, tal como lo hacen desde cinco años entregaron diplomas de reconocimientos a personajes que de manera desinteresada se han sumado a esta preservación del “mequé” en honor a Santa Cecilia; sobresaliendo en este año el homenaje post mortem al antropólogo y maestro pitero, Leopoldo Gallegos (+), quien falleció en el mes de febrero de este año y que con sus estudios acerca del “costumbre” de los zoques de Tuxtla contribuyó en gran medida a su difusión y preservación de este riqueza cultural que se resiste a extinguirse.
A nombre de sus familiares del antropólogo y maestro pitero, Leopoldo Gallegos Vázquez (+), la “tía Cari” recibió el diploma de reconocimiento, agradeciendo a los padrinos de la Imagen y a la familia Jiménez Palacios por este momento tan emotivo, elevando oraciones hasta el cielo por esta significativa distinción.
Asimismo, reconocieron a Ramiro Hernández, quien durante muchos sigue formando parte de los grupos de bailadores zoques: Al profesor Adán Palacios (+)- ya fallecido- quien también fue una persona dedicada a la preservación de “el costumbre”, recibiendo los diplomas de reconocimiento a través de sus hijas Carmen, Lupita y su nieto, quienes también agradecieron esta distinción para su señor padre.
