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Los aficionados del Cruz Azul tendrán que seguir esperando. La sed y el hambre de un campeonato, continuarán.
Ayer, después de un partido de ida sin mucho brillo y un primer tiempo opaco en el regreso, el América le propinó dos “pepinos” a La Máquina cementera que se quedó nuevamente sin pitar.
Hubo llanto entre los aficionados del equipo cruzazulino, quien recibió dos anotaciones de Edson Álvarez, el hombre que acabó con la ilusión de un campeonato perfecto.
Desde el arranque del torneo y aún en La Liguilla, parecía que este era el momento del equipo cementero que ahora juega en el Estadio Azteca.
Pero no, la noche se volvió oscura y los cruzazulinos no pudieron levantar la cara. Al final del encuentro parecían desesperados y resignados a la maldición de más de dos décadas sin alzar la copa.
Por el contrario, “El Piojo” Herrera llevó a los azul cremas a un campeonato más. Le faltó sangre y deseo a La Máquina.
