CIRO CASTILLO
Nos cuentan que varios diputados federales por Chiapas, a quienes “la fiesta” se les terminará el próximo año, han comenzado a regresar a sus distritos electorales para intentar “recuperar el voto”.
Varios han, incluso, intentado acercarse a quien despacha en Palacio de Gobierno, creyendo que les puede hacer el caldo gordo, cuando fueron ellos quienes desperdiciaron su oportunidad de ser representantes populares.
Podríamos ir distrito tras distrito y prácticamente todos hicieron lo mismo. Por inexperiencia o soberbia, se perdieron en las mieles de la Cámara de Diputados y se olvidaron de quién los puso allá.
Ahora, cuando el proceso electoral federal prácticamente ha comenzado, han vuelto, como vuelven muchos políticos, solamente cuando les conviene, a buscar a los ciudadanos que los eligieron.
Algunos se creyeron el cuento de que fueron sus méritos los que los llevaron a San Lázaro, cuando fue una ola llamada AMLO, quien los empujó hacia allá.
Muchos, en su vida soñaron con ser diputados federales; sin embargo, esta pudo haber sido su debut y despedida…
SAN CRISTÓBA, DE CABEZA
Hablando de debut y despedida en la política, la presidenta municipal de San Cristóbal de Las Casas, Jerónima Toledo, a quien el cargo le cayó de sorpresa, ya no siente lo duro sino lo tupido.
La alcaldesa simplemente no ha podido con el cargo, ya que evidentemente no estaba lista para ello.
Uno de los problemas que se le han disparado, lamentablemente porque San Cristóbal es un punto cultural y turístico clave para Chiapas, es la inseguridad.
Ha habido protestas al respecto, y en las últimas 48 horas ocurrieron al menos dos hechos violentos preocupantes: el asesinato de un taxista y un asalto bancario a plena luz del día.
Si la funcionaria no tiene las capacidades para gobernar a uno de los municipios más importantes del estado, obviamente no tendrá quien controle aspectos como la inseguridad.
Tendrá que ser el gobierno estatal y organismos como la FGE, quienes le corrijan la plana…
NOSOTROS NO FUIMOS
Ahora resulta que los normalistas y maestros interinos no fueron quienes prendieron fuego al camión del Conejobus en la plaza central de Tuxtla Gutiérrez este lunes.
Acusan, como ya se hizo costumbre, cuando quieren capotear un hecho violento, la presencia infiltrados.
Así quieren quitarse la culpa de haber participado a todas luces en un hecho vandálico, condenado por la sociedad y por sectores como el Consejo Coordinador Empresarial y la Cámara de Comercio.
Serán las investigaciones las que indiquen qué fue lo que realmente sucedió en este hecho violento y quiénes fueron los responsables. La ley es la ley y ahora caiga quien caiga.
Talvez, ahora sí, esos a los que se les pasó la mano al incurrir en un hecho vandálico, escarmienten…
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