Sr. López
Tía Cuquita estuvo casada toda la vida con tío Mariano (de los 16 a los 87 cuando enviudó, 71 años de matrimonio sí es toda la vida). El tío era simpático, tontón y mitómano. Era divertido oírlo de vez en cuando, solo de vez en cuando, decir cosas como que él había dado a Lázaro Cárdenas la idea de expropiar el petróleo; sus peripecias cuando casi lo matan por haber descubierto la fórmula de la Coca Cola; que tenía un método para ganar la Lotería y por eso, Gobernación le tenía prohibido comprar billete; o que le había regalado la letra de “Madrid” a Agustín Lara, para ayudarlo a reconquistar a María Félix que “andaba de güila y ¡para qué son los amigos!”. Un día, este menda preguntó a la tía cómo lo había aguantado y dijo sosiega: -“Ni lo oía, hijito, ni lo oía” -solo así.
El domingo pasado desde Campeche, el Presidente de la república declaró que México va a encabezar un movimiento internacional para defender la soberanía de Cuba y conseguir que los EUA levante el “bloqueo”; lo dijo al lado del dictador de la isla, el fementido represor Díaz Canel, quien sabedor de que nuestro Ejecutivo le iba a imponer de su parte (solo de su parte), la más alta distinción que los presidentes de México entregan a extranjeros, la Condecoración de la Orden Mexicana del Águila Azteca en grado de Collar, se mostró agradecido y le echó flores al proyecto del trenecito Maya.
Así las cosas, ahora México va a defender a Cuba del tío Sam (… y sí, tío Marianito compuso la letra de “Caballo prieto azabache”).
Parece que nadie de sus cercanos le ha contado al Presidente que desde la ONU ha sido condenado el “embargo” en 28 ocasiones, en una de ellas, la del 28 de octubre de 2015, solo los EUA e Israel votaron a favor del “embargo” y como dato curioso, muy curioso, en la votación del año 2016, contra el “embargo”, 191 países lo condenaron sin ningún voto en contra porque los EUA… se abstuvieron de votar en su defensa.
Todo el mundo desaprueba la medida porque viola al menos, el principio de igualdad soberana de los Estados, pero nadie parece recordar que el “embargo” fue la respuesta de los EUA a las arbitrarias expropiaciones que hizo Fidel Castro, violatorias también de las leyes de los países civilizados. Pero igual, el tío Sam se abanica con esas resoluciones por más claro que esté que es una inmensa metida de pata que echó a Cuba a los brazos de la entonces URSS y le regaló al dictador Fidel Castro, el discurso para justificar su régimen y la ruina de su país, inducida por su pésimo gobierno (hay años en que han importado ¡tabaco! de la Florida).
Otra cosa curiosa es que el “embargo” impuesto por el renegrido tío Sam, no incluye todo producto, de hecho, los EUA son el principal exportador de alimentos y medicamentos a Cuba, el 80% del consumo de carne y pollo de la isla proviene de los EUA igual que la tinta con que se imprime el Granma, órgano oficial del Partido Comunista Cubano. Chulito.
Así y para sorpresa de muchos ajenos al tema, los EUA son uno de los principales socios comerciales de Cuba. El año pasado fue el récord en el intercambio comercial entre Cuba y EUA y sus donaciones humanitarias a la isla, se triplicaron respecto del 2021. Los diez países con los que Cuba tiene más intercambio comercial, son Venezuela, China, España, Canadá, Holanda, los EUA, Brasil, Vietnam, Italia y Japón. Y se solicita tomar nota: México no está entre esos diez países… o sea: puro jarabe de pico. Mucho amor mucho amor, pero de dinero no hablamos.
El problema no es tanto el “embargo” (que por eso se escribe entre comillas), sino que Cuba no produce ni siquiera lo suficiente para pagar sus importaciones. En entrevista publicada en el semanario oficialista cubano Opciones, Antonio Luis Carricarte, siendo viceministro de Comercio Exterior del Díaz Canel, explicó la proporción del intercambio comercial de la isla: “(…) 23% son exportaciones y el 77% importaciones”. O sea: todo lo que exporta Cuba equivale a menos de una tercera parte de lo que importa.
Lo que tiene a Cuba como está es su régimen, su infinitamente ineficiente régimen que sostiene la planificación centralizada de la economía; régimen en el que el propietario de todos los bienes de producción es el Estado (Raúl Castro y Díaz Canel, para ponerle nombre a las cosas); igual que las empresas, todas, con excepción de algunos pequeños negocios personales y aquellas en las que el Estado se asocia con extranjeros (para construir hoteles por ejemplo, sin poner un peso). Es el gobierno de Cuba el que tiene a Cuba como está. No produce ni deja producir, no crea capital ni valor y la isla entera es una ruina de desgaste, abandono y descapitalización.
Para quien dude que el problema de Cuba es su gobierno, se recomienda echar un vistazo a Venezuela que no tiene embargo y gracias a su socialismo parrandero, está también en la quiebra y como Cuba, sus pobladores huyen con una gran diferencia: en Venezuela no tirotean ni encarcelan a los que se quieren largar. Sí, los EUA son una facha, una birria, pero la gente, mexicanos incluidos, insisten en irse a vivir allá, por algo será.
Así las cosas, nuestro gobierno desempolvó lo de Cuba con desplantes de hermano mayor que va a ayudar a la pobrecita Cuba, confiando en que nosotros, los del peladaje, hacemos como la tía Cuquita, ni los oímos, porque de otro modo no se entiende la tranquilidad con que representan la comedia de equivocaciones que es esto que hacen, en lugar de gobernar.
La otra posibilidad es que se trate de mantenernos distraídos por ejemplo, de que en 2022 el endeudamiento del sector público en México ascendió a un billón 260 mil millones de pesos, el más elevado en 15 años… mientras el Presidente insiste en que no ha endeudado al país ni un peso.
Viene a la memoria el Pirulí: “Siempre fui llevado por la mala/ y es por eso que te quiero tanto/… ¡Y qué más da!, la vida es una mentira/ ¡miénteme más!, que me hace tu maldad feliz”.
Sí, que salven a Cuba, ya luego vemos qué hacer con México, ¡qué más da!