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En el corazón de la cultura zoque, el Pimbu se erige como uno de los platillos más representativos del municipio de Copainalá, un deleite que combina tradición y sabor en cada bocado.
El Pimbu, consiste en una crema de elote “tierno” especiada con tomate y cebolla, enriquecida con el distintivo sabor de las hojas de chipilín, un ingrediente emblemático de la gastronomía chiapaneca qué puede ser encontrado en diferentes platillos como los tamales o diferentes guisados.
Dependiendo de la región, esta preparación puede variar: en Tuxtla Gutiérrez, por ejemplo, suele acompañarse con bolitas de masa rellenas de queso o sencillas, adaptándose al gusto y las costumbres locales.
Este platillo, además de ser una tradición en las mesas zoques, es una opción ideal durante los viernes de Cuaresma, ganando el reconocimiento tanto de locales como de visitantes. El turismo gastronómico que explora los sabores chiapanecos, elogia su textura y su sabor característico único, que reflejan la riqueza culinaria de la región.
El maíz, ingrediente central del Pimbu, ha sido una fuente vital de alimento desde tiempos ancestrales en Mesoamérica. En México, este grano sagrado ha inspirado una variedad de platillos que van desde tortillas, tamales y atoles, hasta creaciones como el Pimbu, demostrando su versatilidad y su papel esencial en la cultura alimentaria.
(Con información de Noé Farrera)
