No seamos pesimistas: La Feria

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SR. LÓPEZ

La abuela Virgen (la materno-toluqueña), ¡esa!, la de los siete embarazos y le seguían diciendo así, la que dedicó toda su vida a rezar y cocinar (de la calidad de sus rezos, Dios sabrá; de su cocina nadie dudaba), estaba mal, mal, pero en serio, mal: la garganta cerrada con una infección marca Gayosso y unos calenturones que parecía iba terminar como huevo cocido. Su médico de siempre (un viejito casi ciego), al que ella le tenía más confianza que el Papa a la Santísima Trinidad, le recetó unos chochitos, que ella tomaba con una conmovedora fe. La familia estaba haciendo Novenas a San Judas, porque la señora se veía cada vez peor y no aceptaba que la viera otro médico. El progenitor de este menda (yerno de la abuela), sabía de todo y de medicina, mucho (otro día le cuento); era un señor serio, de poco hablar que la trataba de “usted”. La curó en tres días y la abuela no le habló tres meses, porque don Víctor, con la plena oposición de su suegra (la abuela), a la fuerza (él era un orangután de fuerte y ella, bueno, ya estaba muy viejita), le inyectó penicilina en dosis para rinoceronte: “faltándome al respeto”, explicaba llorosa la abuela, porque la inyectó en las nalgas. Pues sí, pero la curó. La familia, respiró.

“Siempre vamos a defender y a tender la mano fraterna a todos los migrantes: AMLO ‘Vamos siempre a defender a los seres humanos, porque solo siendo humanos podemos ser felices, solo amando al prójimo’, dijo el mandatario en Apizaco, Tlaxcala (nota de Misael Zavala; El Universal, viernes 31 de mayo de este año del señor de Macuspana).

¿Alguien tiene algo en contra de la defensa de los seres humanos?… no, claro que no.

¿Alguien se opone a que seamos ‘humanos’?… por supuesto que no. Seamos, seamos.

¿Alguien no quiere ser feliz?… ninguno, todos queremos serlo.

¿Alguien considera equivocado amar al prójimo?… ¡nooo, nadie!, ruge el respetable.

Muy bien. Ahora:

¿Alguien quiere que sin ningún límite entren y permanezcan en el país los migrantes que lleguen (por ejemplo 10 millones de africanos… 100 millones de chinos?… no, eso es jugar con trampa, jamás llegarán esas cantidades de migrantes a nuestro país. Cierto, pero importa sembrar la duda en la validez universal del  “Siempre vamos a defender y a tender la mano fraterna a todos los migrantes”…

Otra pregunta:

¿Por defender a los migrantes, estamos dispuestos a enfrentar una guerra comercial con los EUA?… antes de que responda, recapacite: una pleito  económico México-Estados Unidos, es como un una pelea de box del Canelo contra un señor de 98 años.

La misma nota ya citada agrega una parte más de las palabras de nuestro Presidente:

“Siempre vamos a defender a nuestro paisanos migrantes, y no solo a los migrantes mexicanos, todos los que por necesidad se buscan la vida y salen a otras partes, se echan a andar porque no tienen oportunidades de trabajo, o porque en sus lugares de origen hay mucha violencia, todos los migrantes merecen nuestro respeto y nuestra comprensión y nuestra mano fraterna”.

¡Aaah!, la cosa cambia, estamos hablando de defender a los migrantes mexicanos (está bien, además la ley obliga a nuestro gobierno a hacerlo, faltaba más); y para todos los migrantes, estamos hablando de “respeto”, “comprensión” y “mano fraterna”… mire usted, ya se estaba asustando este menda: estamos hablando de nada…  ¿respeto? (lo que quieren es quedarse aquí o en los EUA, que les den trabajo, servicio médico, vivienda, derechos civiles, no buscan “respeto”); ¿comprensión? (eso no les quita el hambre ni les arregla los pies llagados… “te comprendo hermano… pero, marchando… para allá es la salida… y ni te preocupes: te comprendo”); ¿mano fraterna? (bueno, sin albur: ¡aquí está esta mano!)

(Una anotación marginal, digo, que alguien le avise a nuestro Presidente: desde hace algunos años, el número de migrantes mexicanos hacia los EUA, es negativo: regresan más de los que van).

No es la migración de nuestros connacionales lo que tiene al gañan de Trump tan enchilado… es el discurso de puertas abiertas (discurso), que atrajo hacia México corrientes masivas de migrantes (de África, por ejemplo), que por las palabras y actitud de nuestro Presidente, ven a nuestro país como “corredor” seguro rumbo a la tierra yanqui. Y, digo, de pasadita: el barbaján del Trump, ni está enchilado: está a la pepena de votos para su reelección. Los que están que trinan son los ciudadanos de su país… con razón, por cierto: no es lo mismo dar cobijo en su casa (con comida y sustento) a un par de personas en situación de calle, que meter a su casa 40 extraños que no tienen donde vivir. No es lo mismo (para mayor información: pregunten en Tapachula).

Para el patán del Trump es crucial ganar su reelección, no solo por el gustito, sino porque tiene problemas legales gordos, que solo siendo presidente de su país, no le van a dar quebraderos de cabeza muy serios. Y se cansa ganso que nos mete aranceles y nos destroza la economía (si eso le da, le asegura, los votos que necesita como agua de mayo).

Este menda no sabe qué se debe hacer, pero sí sabe una cosa: durante mucho tiempo se ha hecho y hemos llevado la fiesta en paz con un vecino tan poderoso, peligroso e inescrupuloso. Ojalá y los que saben de esta materia, se acerquen a nuestro Presidente y le digan y los oiga.

Y un por cierto: ¿de veras los migrantes tienen derecho a meterse a cualquier país, nomás porque son personas?… ¿de veras tienen derecho a recibir alimentación, servicio médico y empleo, nomás porque llegan y dicen “ya llegué?… está bueno saberlo; ahora que alguien nos explique para que hay fronteras, pasaportes, visas… ¿para qué hay países y nacionalidades?… no se entiende… todos somos hermanos, unamos las manos, cantemos el “Himno a la alegría”… seamos felices.

Es cosa muy reconfortante que nuestro Presidente tenga sentimientos tan bonitos. Ojalá no nos hunda el Trump, porque nos puede deshacer con menos esfuerzo que usted para botar las chanclas. No seamos pesimistas.

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