Ciro Castillo
Y de nuevo estamos en las celebraciones del Día de Muertos, esas que solo quienes hemos nacido en esta bendita tierra alcanzamos a comprender. Celebrar la muerte casi igual o hasta más de lo que se celebra la vida, parece irónico, pero es la mera realidad.
Los muertos, según dicta la tradición, regresan a visitar a los que seguimos en este mundo terrenal a jalones y estirones, tras el paso de una pandemia que ha dejado más de medio millón de muertos y una ola violenta que nomás no parece tener fin, sino todo lo contrario.
¿Será esta forma que tenemos de ver la muerte es la que nos permite sobrellevar una ola delictiva que ha dejado, hasta el viernes, 137 mil 715 homicidios dolosos en lo que va del sexenio de Andrés Manuel López Obrador?Se estima que, entre febrero de este año, la guerra entre Ucrania y Rusia ha dejado más de 5 mil muertos, pero, inédito, en nuestro país en ese mismo período van unos 20 mil homicidios a causa de la violencia que tiene con el Jesús en la boca a millones de habitantes en entidades como Zacatecas, Guanajuato, Michoacán, Guerrero y otras.
¿Será esa forma tan laxa de ver la muerte la que permite a los mexicanos salir entre las naciones más felices cuando se realizan sondeos al respecto?
Quisiéramos, como hemos expresado con antelación, que la estrategia de seguridad planteada por la autollamada Cuarta Transformación hubiera dado los resultados esperados; sin embargo, hasta ahora, la realidad que es muy terca, dice lo contrario.
Se han atacado las causas y no solamente las consecuencias de sexenios de abandono, aseguró Adán Augusto López Hernández, uno de los aspirantes a ser candidato presidencial de Morena y quizá tenga razón.
Este gobierno, al que también se ha fustigado por dar continuidad a la permanencia de las fuerzas armadas en las calles haciendo tareas de seguridad, como nunca, ha entregado apoyos sociales, pero han sido insuficientes. Esta ola violenta que deja muertes y muertes va más allá de todo eso. Quizá es la corrupción. Quizá es la impunidad. Quizá es la desigualdad. Quizá es simplemente que no le tenemos miedo a la muerte.
Sabemos que un día nos alcanzará, pero mientras no nos toque miramos hacia adelante, aunque lo que dejamos atrás sea enteramente doloroso…Sin regateos
Es bien sabido que a los mexicanos y, por supuesto a los chiapanecos, nos cuesta aceptar cuando alguien tiene éxito en alguna materia.Pasa con los políticos y en mucho se debe a que por sexenios nos han dado atole con el dedo. Nos dicen una cosa y resulta que termina pasando otra.
Por ejemplo, cuando el gobierno de Rutilio Escandón Cadenas, quien ha sabido marcar su raya, aunque pertenezca a la 4T, presume que la entidad tuvo 48 horas de saldo blanco con respecto a delitos de alto impacto, hay ciudadanos y voces que cuestionan los datos. Regatean un logro que no es producto de la casualidad, sino del esfuerzo en la materia que es encabezado por Escandón Cadenas, quien, eso sí, ha resultado ser un político disciplinado y derechito.
Parece poco que una entidad como la nuestra, de las mejores en materia de seguridad, presuma 48 horas sin delitos dolosos. Se nos olvida que entidades como Zacatecas o Guanajuato, mucho más al centro del país, donde podríamos pensar que la vida es miel sobre hojuelas, hay jornadas violentas que dejan decenas de víctimas.
No podemos decir que estamos viviendo en el paraíso, es cierto, porque no estamos exentos de una realidad que nos ha alcanzado a todos, pero son cifras que tendríamos que reconocer sin regatear. Que ojalá y se mejoren, por supuesto. Que ojalá todos los días fueran de saldo blanco de todos los delitos, pero claro. Que pudiéramos salir a cualquier hora del día y de la noche sin el temor de que algo nos puede pasar, pero desde luego.
De alguna forma, todos, autoridades y sociedad somos responsables de lo que suceda y de lo que no suceda. A donde ahora estamos no es obra de un sexenio ni de un solo hombre o mujer…
Aderezos
-La FGR anunció que incautó más de dos toneladas de presunta droga en el municipio de Tapachula. La pregunta es ¿por qué parece que los aseguramientos siempre ocurren por un golpe de suerte?
-A Manuel Espino, antes dirigente del PAN y ahora rebautizado por el “guinda” del morenismo, se le fue la lengua y propuso que se pacte con el narco. Lo tundieron a “tuitazos” y todos se dieron golpes de pecho, pero cuál es la realidad. Es pregunta…
-Nos cuentan que en el Congreso del Estado hay algunas diputadas y diputados que se olvidaron que están ahí porque les dieron un “regalo” que ni siquiera se esperaban. Algunos de esos ya se sienten fundadores de Morena…
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