CIRO CASTILLO
Empieza a sonar la idea de que pronto comenzará el “desconfinamiento” en varias regiones de México, donde la pandemia del COVID-19 alcanzó su pico más alto e irá a la baja.
Aún con los riesgos y miedos que ello implica, el gobierno federal anunciará que viene el levantamiento de la que ha sido llamada Jornada Nacional de Sana Distancia, la cualtuvo como su principal acción el llamado a quedarse en casa.
Comenzará la reapertura de actividades que, en su momento fueron consideradas como no esenciales, por ejemplo, la industria automotriz, aunque ya no será como antes.
La situación sanitaria es muy complicada y aún habrá miles de contagios y quizá cientos de muertos; sin embargo, la presión económica de la misma sociedad mexicana que ya no aguanta más el encierro y de los Estados Unidos, comienza a ser muy fuerte.
La mañana de este miércoles se espera que Andrés Manuel López Obrador presente una serie de acciones o medidas para que varias regiones del país y municipios donde no ha habido contagios, comiencen a regresar, poco a poco, a “la nueva normalidad”…
CÓMO SERÁ LA NUEVA REALIDAD
El titular de Salud en Chiapas, José Manuel Cruz Castellanos, soltó este martes en su conferencia de las 13 horas para informar de la situación del coronavirus en el estado, algo de lo que será la nueva realidad de México y de la entidad.
Dijo que no hay una fecha precisa para un eventual regreso a clases, pues tendrán que esperar los lineamientos marcados por la federación, pero adelantó que las medidas sanitarias se extenderán hasta octubre y quizá hasta diciembre.
Sin que lo dijera explícitamente, esa es la nueva realidad que nos espera de aquí en adelante.
Mientras no haya una vacuna preventiva, como la hay para la poliomielitis, el tétanos, la difteria y otras, el Sars-Cov-2 nos obligará a continuar aplicando medidas sanitarias más estrictas, pues de lo contrario, habría un rebrote.
Tendrá que haber filtros sanitarios estrictos y hasta cierta distancia social en las escuelas el día que se vuelva a las aulas, si es que se vuelve en este ciclo.
El uso de gel antibacterial será prácticamente obligatorio en oficinas públicas y particulares, restaurantes, cines, plazas y hoteles, claro, en el momento que este tipo de negocios vuelvan a abrir.
Habrá incluso, chequeos (o tamizajes) para los viajantes nacionales y extranjeros que ingresen al estado, aunque se trate de turistas que generan derrama económica. Se mantendrán los filtros sanitarios y el saludo no volverá a ser igual por mucho tiempo. El temor de contagiarnos seguirá. Esa es la nueva normalidad…
INVERTIR EN SALUD E INVESTIGACIÓN
Consciente, precisamente de la nueva realidad que vive y vivirá México, el senador chiapaneco, Eduardo Ramírez Aguilar, anunció que el Senado mexicano donará 250 millones de pesos para labores contra el COVID-19.
Estos donativos servirán para dos frentes: en materia de salud y para empujar investigaciones que ayuden a prevenir o controlar este nuevo virus que ha puesto al mundo de cabeza, por decirlo de alguna forma.
Los recursos irán destinados al Consejo General de Salubridad y a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), indicó el legislador, quien detalló que los dineros “serán destinados para la compra de medicamentos, instrumentos, batas, mascarillas, respiradores, entre otras necesidades del sector salud, en tanto que el recurso dispuesto a la UNAM será para el rubro de la investigación en torno a esta pandemia.”
El donativo, aclaró el legislador oriundo de Comitán que siempre está pendiente de los temas del momento, no afecta al personal legislativo pues se tomó del presupuesto para operaciones legislativas. La nueva normalidad…
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