CIRO CASTILLO
A todos los presidentes les gusta erigirse como los salvadores de una nación, y también es el caso de Andrés Manuel López Obrador, quien desde hace unos 20 años ha pregonado la idea de salvar a México con una cuarta transformación.
La cosa es que ahora la cosa podría ir más allá de nuestras fronteras y podemos o no estar de acuerdo con el fundador de Morena, pero como hemos dicho antes, podría ser una opción, claro, si se hace bien.
Desde el gobierno de Donald Trump, el tabasqueño intentó conseguir fondos para “promover el desarrollo” en los países que forman el llamado Triángulo Norte de Centroamérica: Honduras, El Salvador y Guatemala.
Se anunció incluso, la replicación de programas como Jóvenes Construyendo el Futuro y Sembrando Vida, aunque no se ha clarificado bien, cuántos recursos y cómo se invirtieron.
Ahora, en la primera reunión virtual con Joe Biden, parece que la mejor expectativa, aparte de la promesa de legalizar a 30 millones de migrantes mexicanos que viven en la Unión Americana es una posible inversión de 4 mil millones de dólares en la región Sur de México, pero también en Centroamérica.
Aún se desconocen los detalles de este “pre acuerdo”, pero podría ser un buen inicio en la nueva relación México – Estados Unidos, insistimos, siempre que se proyecte y ejecute bien, además de que nuestra nación no se presente como el salvador de estas naciones…
T-MEC, VACUNAS Y CAMBIO CLIMÁTICO
No hubo ningún desacuerdo, fue la frase que utilizó AMLO para definir cómo fue el primer acercamiento con Joe Biden, quien contó que tiene un escapulario de la Virgen de Guadalupe, que pertenecía a su hijo, ya fallecido.
Obrador no sacó los “detentes”, pero sí una vieja frase atribuida a Porfirio Díaz que dice: tan cerca de Dios y tan lejos de Estados Unidos. Ahora queremos que sea más cerca de Estados Unidos, bromeó, arrancando algunas sonrisas en el demócrata que, muy educado, muy educado, pero no es una perita en dulce.
Además del tema migratorio y una posible inversión en Centroamérica, Biden puso en la mesa el asunto del cambio climático, el Tratado de Libre Comercio (T-MEC) y, como no queriendo la cosa, dejó abierta la posibilidad de una cooperación entre ambas naciones en el tema de la lucha contra la pandemia contra el COVID19, donde ellos, por obvias razones, nos llevan gran distancia en el tema de la vacunación. México ha aplicado 2.5 millones de dosis y ellos unos 75 millones.
“Lo que le puedo decir al pueblo de México es que hubo aceptación de nuestra propuesta acerca de la necesidad que tenemos de enfrentar de la mejor manera posible la pandemia, y la necesidad de contar con las vacunas.
No puedo decir que se logró ya el acuerdo, tampoco de que no hubo acuerdo. Nos fue bien, eso es lo que puedo decir”, expresó AMLO, para resumir la petición de compra de vacunas al vecino del Norte, quien, al menos ahora, no quiere ser el salvador de la nación azteca y prefiere salvar primero a los suyos…
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