Ciro Castillo
Escribo en primera persona en el mero Día de las Madres: cuando era niño no había mucho que regalarle a mamá.
Para los que tuvimos la fortuna de crecer en el campo, la situación era de escasez. No habían Oxxos, ni Chedrahuis, ni Ahorrerás, ni Walmarts, ni mucho menos esas tiendotas que dicen ser parte de tu vida o que te entienden.
A lo mucho existía un tendajón, en el que solo encontrabas galletas de Surtido Rico, algún frasco de duraznos en almíbar y alguna golosina.
De los “ahorros personales” había que apartar algo para ese gran día, uno de los más esperados del año.
Eso sí, no faltaban los que se organizaban y desde la madrugada repartían mañanitas de casa en casa. No era mariachi, sino un grupo de niños que cantaban horrible, pero cantaban.
La escuela era el centro de cultivo de amor y respeto a la mamá y días antes o el mero día, cuando la fecha así lo permitía, se organizaba un festival en honor a la señora de la casa.
No faltaban las poesías, las “obras de teatro” y los bailables, casi siempre con música típica chiapaneca; a veces se colaba una que otra polka norteña (en ese tiempo no existía el reguetón).
Otros tiempos
Hoy, en tiempos de redes sociales y de telefonía celular, las cosas son diametralmente opuestas.
Abundan los regalos y por alguna razón, aunque digan que hay crisis económica e inflación, existen muchos lugares donde comprar un buen detalle para el Día de las Madres; hay facilidades de pago, créditos “blandos” y pagos en abonos chiquitos.
Lamentablemente, los festivales de las escuelas están en peligro de extinción, sobre todo desde que la pandemia fue la excusa perfecta para mermar el trabajo en las aulas.
Abundan los memes, los videos en el Tik Tok, en el Face y en el Twitter, pero escasean los mensajes escritos única y exclusivamente para mamá. De las cartas en papel, mejor ni hablamos; desaparecieron hace tiempo.
Irónico, pero cierto, la tecnología nos acercó porque nadie se escapa de ser localizado en el día o en la noche, pero puso una barrera entre los seres humanos.
Así, el festejo a la madre se volvió mercadológico, publicitario, de consumo, pero frío, lejano, de guardar las apariencias, de quedar bien aunque sea el único día en el año…
Cuántas Yolandas
El caso de Debanhi tuvo y sigue teniendo una gran cobertura en los medios de comunicación y las redes sociales continúan inundadas de versiones que apuntan en uno u otro sentido.
Al contrario, la desaparición de Yolanda Martínez Cadena pasó casi inadvertido para los mismos medios y las “benditas” redes sociales, que son una especie de “termómetro” del acontecer nacional, aunque no siempre acertado.
La joven de 26 años de edad, quien solo cometió el “pecado” de salir a buscar trabajo el 31 de marzo, es otro motivo para, al menos, hacer un alto y reflexionar sobre lo que está ocurriendo en nuestro país.
Por qué tanta desaparición de mujeres. Es todo culpa del crimen organizado o también de la falta de aplicación de la ley de parte de las autoridades y la impunidad rampante.
El cuerpo de Yolanda Martínez (con las investigaciones en curso) fue localizado en Juárez, un municipio aledaño a Monterrey, pero cuántas otras Yolandas habrá en el país.
Cuántas madres desaparecidas, asesinadas o cuántas mamás que buscan a sus hijas e hijos.
Un reporte del Comité Contra la Desaparición Forzada indica que hay al menos 52 mil cuerpos sin identificar en semefos y sitios habilitados para “guardarlos”, sin contar a otros 100 mil desaparecidos, cuyos restos no se sabe dónde están.
El presidente saliente de la Corte, Arturo Saldívar aceptó este inicio de semana que la justicia en nuestro país es selectiva, es decir, hay miles de inocentes en las cárceles.
Si el representante del máximo órgano impartidor de justicia en la nación hace esta “confesión”, qué se puede esperar para aquellas madres que fueron asesinadas o aquellas madres que buscan a sus seres queridos, por los que exigen eso, justicia…
Aderezos
-Duro han cuestionado el anuncio del Andrés Manuel López Obrador, quien informó que traerán a México a 500 médicos cubanos. Se cuestiona, sobre todo, que médicos que laboraron en la pandemia no fueron recontratados, y entonces porqué traer a extranjeros…
-Contraproducente podría resultar para Zoé Robledo y sus aspiraciones, la noticia de que el IMSS incorporará a miles de guatemaltecos a este sistema de salud. Pero cómo por qué dicen los internautas…
-Siempre lo decimos: de que los hay los hay. Al alcalde de Tzimol se le ocurrió regalar cubetas de plástico en el Día de las Madres…
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