Ciro Castillo
Lo sucedido este martes en el Senado de la República, cuando solo faltaba un pasito para la aprobación de la reforma al Poder Judicial de la Federación (PJF), de nuevo da la razón a quienes aseguran que detestan la política porque es un cochinero.
LOS YUNES
A reserva de que se tengan más detalles porque la información era cambiante, casi a cada momento, resultaron ser los Yunes de Veracruz los grandes traidores de esta nueva modificación constitucional que, algunos, dicen, demolerá a uno de los tres poderes, sobre todo, porque existe el riesgo de que “improvisados” alcancen cargos de jueces, magistrados y ministros, además de cientos o quizá miles de cargos en toda la estructura del Poder Judicial de la Federación. En una de esas podría haber hasta “tombolazos” para la designación de algunos cargos.
Desde el lunes comenzó a correr el rumor de que quien cedería a las presiones del poder (o negociación jugosa de órdenes de aprehensión) en turno sería el senador por Veracruz, del PAN, Miguel Ángel Yunes Márquez, a quien, simplemente nadie podía localizar.
Llegó el medio día del martes y entonces apareció Miguel Ángel Yunes Linares, su padre y suplente en la Cámara Alta, flanqueado por legisladores de Morena, lo que hacía suponer que había sido coptado o, insistimos, realizado una buena negociación.
Este, tras un enfrentamiento verbal con Marko Cortés, dirigente nacional del PAN, quien tampoco es una blanca paloma, sino todo lo contrario, aseguró que su hijo no es un traidor y si no se presentó a la sesión fue por un problema de salud en la columna (qué casualidad) y así quedará en evidencia con documentos médicos.
Argumentó, además de ser defendido por Félix Salgado Macedonio, padre de la gobernadora de Guerrero, que su voto sería en libertad, pero prácticamente rompió con los panistas, quienes no dejaron de gritarle traidor desde la tribuna, mientras el presidente de la Mesa Directiva, Gerardo Fernández Noroña, intentaba poner orden.
Para hacer más grande el “reality show”, lo cual, insistimos, brinda más argumentos a quienes detestan a la política y a la mayoría de los políticos, Lily Téllez, quien antes fue de Morena y ahora volvió al PAN, le lanzó 30 monedas al también exgobernador de Veracruz, Yunes Linares.
Al medio día de este martes y luego del episodio protagonizado por los Yunes, todo indicaba que era cuestión de horas para que la reforma al Poder Judicial fuera aprobada…
EL OTRO TRAIDOR
Y mientras los legisladores del partido Movimiento Ciudadano se daban golpes de pecho y aseguraban que no serían ellos quienes traicionarían a “la oposición”, resultó que tenían un “judas” entre sus filas.
El senador Clemente Castañeda quiso justificar la ausencia de Daniel Barreda, argumentando que el gobierno de Campeche, estrafalariamente dirigido por Laida Sansores, había sido detenido junto a su padre.
Dos legisladores de Morena, entre ellos, Adán Augusto López Hernández, desmintieron tal versión y aseguraron que el flamante senador del movimiento naranja estaba en la capital del país.
Después comenzó a trascender otra versión: Daniel Barreda no estaba detenido, al igual que su padre, sino que se había entregado a los brazos del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), donde eso de venderse al mejor postor, es el pan de cada día.
Los morenistas, a quienes urge aprobar la reforma al Poder Judicial antes de la ceremonia del Grito de Independencia, para que AMLO pueda incluirla dentro de las arengas, habían logrado el objetivo, conseguir la mayoría calificada y superar el número. Tendrían con ambas incorporaciones 87 votos.
Afuera del Senado de la República, un puñado de trabajadores del PJF, quienes consideran que su empleo está en riesgo, decían las crónicas en los medios televisivos nacionales, comenzaron a bajar los brazos y a dar muestras de tristeza.
La suerte está echada: López Obrador antes de irse tendrá la reforma judicial que, según él y quienes lo siguen, terminará con la corrupción al interior de uno de los tres poderes. El tiempo dirá quién tiene la razón…
ADEREZOS
-Las vueltas que da la vida. Gerardo Fernández Noroña, presidente de la Mesa Directiva en el Senado de la República, recibió una sopa de su propio chocolate. El experto en armar broncas en la sede legislativa, ahora hacía llamados al orden cuando los panistas increpaban a Miguel Ángel Yunes Linares, pero poco caso le hacían. Después, supuestos trabajadores del Poder Judicial le tomaron la sede legislativa…
-Una fotografía del gobernador electo de Chiapas, Eduardo Ramírez Aguilar, con Raciel López Salazar, exprocurador de Justicia de la entidad y ahora funcionario en el gobierno de Quintana Roo, causó tremendo revuelo entre la clase política de la entidad, pero también en las redes en general. Comenzaron las especulaciones respecto a si este personaje con claroscuros, quien laboró en el sexenio de Juan Sabines, podría volver a ocupar un cargo…
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