Ciro Castillo
Hace varios sexenios escribimos que cuando un presidente de la república comprendiera que el Horario de Verano resulta desagradable para la mayoría de la población mexicana (más del 70 por ciento, según una encuesta mandada a realizar por Secretaría de Gobernación) y se atreviera “tirarlo” ganaría mucha popularidad.
Esta medida que nos fue vendida como una forma de ahorro de energía a nivel macro se estableció en el gobierno de Ernesto Zedillo Ponce de León en 1996 y más que un beneficio para los mexicanos, resultó incómodo.No es que adelantar los relojes en abril y luego regresarlos a la Hora de Dios en octubre cause tantos problemas en el organismo de los mexicanos, pero sí resulta incómodo.
México, a pesar de que el 79 por ciento de la población, según datos del INEGI, vive en zonas urbanas y el 21 por ciento en zonas rurales, sigue siendo una nación, digámoslo así, tradicionalista; por eso los políticos tocan con pinzas temas como el aborto o la legalización de las drogas.
La mayoría de la población que habita en áreas rurales, es decir, unas 4 mil 215 localidades, se duerme a temprana hora y se levanta con el “cantar del gallo”; para ellos, despertar viene siendo una especie de ritual que es alterada cuando el reloj tiene que adelantarse porque “papá Gobierno” así lo indica.También, el mexicano difícilmente acepta una idea, a menos de que esté convencido de que realmente traerá un beneficio a sus bolsillos y con esta medida oficial no sucedió así.
Los gobiernos de Zedillo, Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña, dieron continuidad al Horario de Verano, bajo el argumento de que permitía importantes ahorros de energía; la realidad, dicen expertos, es que obedece a una medida internacional que equilibra la apertura de las bolsas de valores.
Nos siguieron diciendo que el país ahorraba mucha energía al mantener nuestras actividades con una hora más de luz natural.
El argumento social, aunque nunca fue escuchado, era: sí, pero igualmente nos levantamos temprano y tenemos que prender los focos de la casa.
En municipios fronterizos de Chiapas con Guatemala, el Horario de Verano nunca ha sido respetado. Lo hacen porque viven en áreas rurales, pero también porque hay una gran actividad comercial con los chapines, la cual se vería afectada por esos movimientos en el reloj.
Aquí seguimos con la Hora de Dios dicen siempre con orgullo, aunque cuando vienen más al centro de la entidad o del país tienen que adaptarse…
Va la iniciativaAndrés Manuel López Obrador es, sin duda, un animal político. De hecho se había tardado en sacarle jugo a una iniciativa como la cancelación del Horario de Verano.
Ahora que se acercan las elecciones y seguro de que le sacará raja, al fin envía la iniciativa para echar para abajo este horario, lo cual será pan comido, pues requiere en las cámaras, una mayoría simple.
Alguien aconsejó al Presidente de México que modificar el Horario de Verano le traerá una buena carretada de votos, principalmente entre quienes viven en áreas rurales y las personas adultas mayores, quienes, insistimos, obedecen a su reloj biológico.
Lo hemos escrito varias veces: la popularidad del tabasqueño nomás no baja, a pesar de que ya se cumplieron cuatro años de su triunfo electoral en 2018, pero a quién le dan pan que llore. A pesar de que él ha comenzado a “placear” a sus cuatro “corcholatas” presidenciables y en la oposición, de plano la caballada sigue estando muy flaca, una ayudadita con una reforma popular impulsada por Morena no le viene mal a nadie.
Este martes, en la mañanera (donde dan a conocer las noticias que hacen eco, políticamente hablando) AMLO firmó la iniciativa que enviará al Congreso de la Unión para eliminar el Horario de Verano.Rocío Nahle, secretaria de Energía y Jorge Alcocer, secretario de Salud, esgrimieron sus argumentos energéticos y de salud, para apoyar la decisión del presidente mexicano.
“Hoy enviamos, y se va a explicar la iniciativa de reforma para eliminar el llamado Horario de Verano”, expresó López Obrador, antes de la intervención de los dos funcionarios quienes indicaron que un estudio de Gobernación revela que el 71 por ciento de los mexicanos no quieren seguir adelantando sus relojes en octubre y con eso de que el pueblo manda, pues que se note…
Aderezos-Sigue fuerte el rumor de que el padre Marcelo Pérez podría ser detenido por la Fiscalía General del Estado, pero no hay nada oficial. Lo dicho, es un religioso, pero siempre le ha gustado jugar a la política…-AMLO acusó que los conservadores son quienes azuzan a las iglesias para echarle montón después de la muerte de dos sacerdotes jesuitas, como si la Iglesia Católica no tuviera su propio criterio….-Cada vez está más fuerte la precandidatura presidencial de Adán Augusto López Hernández, tanto, que hasta hicieron enojar a Gerardo Fernández Noroña, quien dijo que hay cargada. ¿Será…?
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